¿Llega la tecnología a cualquier rincón de la lengua?

      Imagen creada con Canva (creación propia)

"No hay nada que la tecnología no pueda conseguir."; "Hoy en día, cualquier cosa se puede hacer usando la tecnología."; "En unos años ya no seremos necesarios en nuestros puestos de trabajo, la tecnología lo hará por nosotros."...

Estas y otras muchas afirmaciones se escuchan cada día en relación con la querida y temida (a partes iguales, me atrevería a decir) tecnología. Es evidente que como docente de ELE también me he cuestionado estos temas, y me he preguntado cómo podría afectar el gran avance tecnológico que caracteriza nuestra sociedad a nuestros puestos de trabajo (algunos no hemos comenzado a trabajar y ya nos planteamos el final 😂). Y siempre acabo llegando a la misma conclusión: la tecnología debe verse como una amiga, nunca como un rival. No podemos negar que ha llegado para quedarse, pero precisamente por eso debemos convertirla en nuestra aliada; podemos servirnos de la tecnología para mejorar la calidad y las experiencias de aprendizaje de nuestro alumnado. 

La reflexión que recogíamos en la pasada videoconferencia, y que he intentado reflejar en la imagen que encabeza esta publicación, me ha ofrecido más argumentos para mantener mi opinión acerca de la tecnología: todavía hay lugares a los que no puede llegar. Y estos rincones son precisamente los que, bajo mi punto de vista, más valor aportan a la labor docente. La emoción que transmitimos por lo que hacemos, las conversaciones en clave de humor, la puesta en común de las riquezas culturales presentes en el aula... Somos mucho más que transmisores de conocimiento, ¡valoremos nuestra profesión como se merece! 👏

Pero por si todavía quedan dudas, os dejo una charla TED en la que Elisa Guerra expone algunos motivos por los que la tecnología no podrá sustituir a los maestros:

Parece que estamos de enhorabuena compañeros, este camino no ha hecho más que empezar. 

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